El método gronholm resumen
el método
Siete candidatos llegan a la gigantesca torre de la sede de Dexia, una multinacional. Todos están allí para solicitar el mismo puesto, algún cargo ejecutivo de alto nivel dentro de la empresa. El primer indicio de que algo no va bien y de que no se sigue el protocolo habitual es que, normalmente, las empresas llevan a los candidatos por separado para las entrevistas, mientras que aquí dejan que se mezclen. Los candidatos sospechan de esta aberración como lo hacían Dean Keaton y compañía en «Los sospechosos de siempre». La segunda pista es que la empresa hace que todos vuelvan a presentar sus solicitudes en la oficina frente a los demás. Se puede sentir cómo la competencia empieza a fluir a medida que cada uno de los candidatos se evalúa mutuamente. Se les lleva a una gran sala de conferencias cerca de la parte superior del edificio y se les dice que la empresa tiene un nuevo método de contratación para los puestos directivos. Todos van a tener que pasar un montón de pruebas entre ellos (en presencia de los demás y a merced de sus juicios) hasta que sea el último hombre o mujer en pie.
tráiler del método
Siete aspirantes llegan a la gigantesca torre de la sede de Dexia, una multinacional. Todos están allí para solicitar el mismo puesto, un trabajo de alto nivel ejecutivo dentro de la empresa. El primer indicio de que algo no va bien y de que no se sigue el protocolo habitual es que, normalmente, las empresas llevan a los candidatos por separado para las entrevistas, mientras que aquí dejan que se mezclen. Los candidatos sospechan de esta aberración como lo hacían Dean Keaton y compañía en «Los sospechosos de siempre». La segunda pista es que la empresa hace que todos vuelvan a presentar sus solicitudes en la oficina frente a los demás. Se puede sentir cómo la competencia empieza a fluir a medida que cada uno de los candidatos se evalúa mutuamente. Se les lleva a una gran sala de conferencias cerca de la parte superior del edificio y se les dice que la empresa tiene un nuevo método de contratación para los puestos directivos. Todos van a tener que pasar un montón de pruebas entre ellos (en presencia de los demás y a merced de sus juicios) hasta que sea el último hombre o mujer en pie.
qué es el método grönholm
Las vidas de Celia, de Antonio Chavarrías, Vete de mí, de Víctor García León, y Lo que sé de Lola, de Javier Rebollo, son las tres películas nacionales en competición oficial en la próxima edición de San Sebastián…
Del 23 de agosto al 27 de diciembre de 2006, la diversidad del cine europeo tomará las pantallas francesas con una serie de estrenos procedentes de España, Portugal, Austria, Hungría, Polonia, República Checa…
Cineuropa es el primer portal europeo dedicado al cine y al audiovisual en 4 idiomas. Con noticias diarias, entrevistas, bases de datos, investigaciones en profundidad sobre la industria audiovisual, Cineuropa pretende promover la industria cinematográfica europea en todo el mundo. Bienvenido a una plataforma donde los profesionales pueden reunirse e intercambiar información e ideas.
El método gronholm resumen en línea
¿Hasta dónde está dispuesta a llegar una persona para convertirse en «el elegido»? Siete candidatos se presentan a una audición para un puesto de alta dirección. El proceso de selección implica la aplicación del llamado método de eliminación de Gronholm, por el que tuvieron que pasar los oficiales del ejército alemán tras la I Guerra Mundial. 5 nominaciones a los Goya en 2006.
Madrid. Miles de personas se manifiestan en una concentración de protesta contra el Fondo Monetario Internacional. En medio de este tenso ambiente, se realizan entrevistas en el rascacielos de una corporación financiera supranacional para un alto cargo directivo. Siete candidatos se someten al proceso de selección que implica la aplicación del llamado método de eliminación Gronholm, basado en pruebas psicológicas, por el que tuvieron que pasar los oficiales del ejército alemán tras la I Guerra Mundial. Ahora el método ha sido adoptado por las grandes empresas. Después de superar un laberinto burocrático sin sentido, los candidatos deben someterse a una prueba cuyo principio se basa en un astuto drama de sospechas mutuas, de desprestigio del carácter, de formación de alianzas, de manipulación humillante y de pasarse la pelota, con la reconfortante seguridad de que «nadie le obliga a hacerlo». Algunos de los candidatos preferirían estar en la calle con los manifestantes, pero no tienen el valor de admitirlo.