Que sabores detectan las papilas gustativas y en que zonas de la lengua se encuentran
¿cuántas papilas gustativas tenemos?
Los sabores amargo, dulce, ácido, salado y salado pueden ser percibidos por la lengua a través de sus receptores gustativos relacionados. El sabor amargo es muy importante en la naturaleza. Nos protege de comer cosas dañinas, que suelen tener un sabor amargo. En esta investigación, buscamos las células que tienen receptores del sabor amargo. Para hacerlas visibles, las marcamos con una proteína verde fluorescente. Estas células verdes se encontraron en la lengua, como era de esperar, pero también en otros lugares fácilmente expuestos a cosas dañinas, como las vías respiratorias, el intestino y la uretra. Nuestro trabajo también demostró que las células que expresan receptores amargos podrían tener la capacidad de activar el sistema inmunitario. En realidad, no podemos sentir el sabor amargo en ningún otro lugar aparte de la lengua, pero los receptores del sabor amargo en otras partes del cuerpo pueden funcionar de forma diferente.
Cuando los alimentos entran en la boca, la lengua puede percibir pequeñas moléculas de los mismos. Sabemos que cada alimento tiene un sabor diferente. Podemos percibir cinco sabores diferentes: dulce, amargo, ácido, salado y salado. Estos cinco sabores se perciben de forma diferente porque la lengua tiene cinco tipos diferentes de receptores que pueden distinguir entre estos cinco sabores.
mapa de la lengua
La capacidad gustativa nos proporciona algunas de las mejores cosas de la vida: el dulzor de los caramelos, el salado de las patatas fritas y el ácido de la limonada. Todos sabemos que empieza en la lengua, pero ¿cómo funciona realmente? Los científicos han descubierto que el sabor procede de una reacción en cadena que comienza en las proteínas sensibles de la lengua, recorre las papilas gustativas, entra en los nervios y termina en el cerebro. Uno de los descubrimientos más sorprendentes es que la sensibilidad al gusto varía de una persona a otra. Cada uno de nosotros vive en un mundo gustativo único, lo que hace que cada uno sea diferente en los alimentos que ama y odia.
Piensa en tu comida favorita. ¿Es la pizza? ¿El chocolate? ¿Sushi? Imagina tu comida favorita y el placer que te produce comerla. ¿Y qué hay de un alimento que no le guste? Los alimentos tienen muchas propiedades diferentes que contribuyen a su disfrute: el olor, la temperatura e incluso la sensación en la boca. Una de las propiedades más importantes de los alimentos es el sabor, la combinación de sensaciones dulces, ácidas, saladas, amargas y saladas que salen de la lengua. ¿Cómo se transmiten estas señales desde la boca hasta el cerebro? Esto ha sido un misterio durante mucho tiempo. Sin embargo, los científicos han descubierto detalles notables sobre las piezas que componen el sistema del gusto y cómo encajan entre sí [1].
cómo funciona el sabor
El café es amargo, las patatas fritas son saladas, las limas son ácidas, los caramelos son dulces y el caldo de pollo es umami. Estos son los cinco sabores básicos con los que estás familiarizado. Pero, ¿cómo se reconoce cada sabor y cómo se distingue uno de otro?
«La lengua no tiene regiones diferentes especializadas en los distintos sabores», dice Brian Lewandowski, neurocientífico y experto en el gusto del Centro de Sentidos Químicos Monell de Filadelfia. «Todas las regiones de la lengua que detectan el sabor responden a las cinco cualidades gustativas. Existen algunas diferencias regionales leves en la sensibilidad a las distintas cualidades del gusto, pero estas diferencias son lo suficientemente pequeñas como para no desempeñar un papel claro en la percepción del gusto.»
La sencillez del mapa lingual contribuye a su atractivo. «Es una figura fácil de entender que parece proporcionar una idea de cómo funciona el gusto sin necesidad de entrar en la biología celular», dice Lewandowski.
Pero, para entender cómo funciona realmente el gusto, hay que observar más de cerca las células especializadas de la lengua. Todo comienza con las papilas gustativas, las partes de la lengua que detectan el sabor. Cada persona tiene entre 5.000 y 10.000 papilas gustativas, la mayoría de las cuales están situadas en las papilas, las pequeñas protuberancias redondeadas de la superficie superior de la lengua. Las papilas gustativas también están repartidas por el paladar y la parte posterior de la garganta. Cada papila gustativa contiene entre 50 y 100 células sensoriales especializadas que detectan los estímulos gustativos.
zonas gustativas de la lengua
Las papilas gustativas son órganos sensoriales que se encuentran en la lengua y permiten experimentar los sabores dulce, salado, ácido y amargo. ¿Cómo funcionan exactamente las papilas gustativas? Pues bien, saca la lengua y mírate en el espejo.
¿Ves todas esas protuberancias? Se llaman papilas, y la mayoría de ellas contienen papilas gustativas. Las papilas gustativas tienen unos pelos microscópicos muy sensibles llamados microvellosidades. Estos pequeños pelos envían mensajes al cerebro sobre el sabor de algo, para saber si es dulce, ácido, amargo o salado.
Una persona media tiene unas 10.000 papilas gustativas que se reemplazan cada dos semanas aproximadamente. Pero a medida que una persona envejece, algunas de esas células gustativas no se reemplazan. Una persona mayor puede tener sólo 5.000 papilas gustativas en funcionamiento. Por eso algunos alimentos pueden saberle más fuerte que a los adultos. Fumar también puede reducir el número de papilas gustativas de una persona.
Pero antes de atribuir a las papilas gustativas todo el mérito de tus sabores favoritos, es importante dar las gracias a tu nariz. Los receptores olfativos situados en la parte superior de la nariz contienen células especiales que ayudan a oler. Envían mensajes al cerebro.