Cómo limpiar un calamar
Calamares con ajo y pimienta
La clave para conseguir unos calamares tiernos y flexibles está en la forma de limpiarlos, prepararlos, marinarlos y cocinarlos. Siga estos pasos de expertos (haga clic en la galería de abajo y vea el vídeo para una orientación más detallada) para hacerlo correctamente:
Al limpiar el calamar, es mejor quitarle la membrana exterior de color rosa violáceo. Es comestible, pero es esta membrana la que tiende a volverse gomosa al cocinarla. Además, el calamar tiene un aspecto mucho más apetecible sin ella.
La propietaria Petrina Loh, de Morsels, en Dempsey Hill, recomienda también marcar los calamares en forma de cuadrícula y marinarlos en leche o suero de leche durante la noche. El líquido ayuda a ablandar el cefalópodo.
La regla general del chef Loh a la hora de cocinar calamares es: a fuego lento, mucho tiempo; y a fuego fuerte, poco tiempo. Por ejemplo, si se guisa, hay que hacerlo a fuego lento durante unas horas. Si se hace a la parrilla, hay que utilizar una sartén caliente y asar durante 30 segundos. Para saltear también hay que poner una sartén a fuego alto y cocinar los trozos de calamar durante no más de 30 a 45 segundos.
Receta de calamares a la plancha
Para conseguir el trozo de calamar que se puede comer, llamado manto, hay que empezar por quitar la cabeza del calamar. Esta es la primera parte que hay que quitar, y se hace cortándola justo por debajo de los ojos. Esto te permitirá acceder más fácilmente al manto e iniciar el proceso de limpieza del resto del calamar.
Cuanto más grande sea el calamar, más tinta tendrá. Aunque ésta suele salir con los demás órganos, a veces puede romperse y derramar tinta. Si esto ocurre, basta con limpiar el calamar bajo el grifo de agua fría y ya está listo.
. Para facilitarte las cosas, siempre puedes comprar una herramienta de limpieza para calamares, como el juego de herramientas de limpieza SquidEzy. Estas pequeñas y prácticas herramientas le ayudarán a ahorrar tiempo y dolores de cabeza durante el proceso de limpieza de los calamares, ya que le permitirán realizar todo el proceso sin la ayuda de un cuchillo.
Cómo limpiar y marcar los calamares
Hay dos tipos de personas, las que adoran los calamares y las que realmente los adoran. Aunque son deliciosos, limpiarlos puede ser una de las experiencias más sucias con las que se encuentran los pescadores.
Limpiar los calamares nada más sacarlos del agua o a temperatura ambiente poco después es un asunto sucio. Si se enfrían primero, la viscosidad de la baba y la tinta aumenta y la limpieza resulta mucho más fácil.
Otra ventaja de limpiar los calamares después de que hayan estado en la nevera es que la carne y las vísceras se vuelven más rígidas. Esto significa que cuando se retira la cabeza, la mayoría de las vísceras saldrán al mismo tiempo. Y lo que es más importante, el saco de tinta saldrá sin descargarse. Bueno, al menos la mayoría de las veces.
Las dos solapas laterales y la piel que rodea el tubo principal pueden retirarse empujando con el pulgar por debajo de una de las solapas y despegando todo el conjunto como una sola pieza. No te preocupes si se rompe a mitad de camino. Es bastante fácil empezar de nuevo y seguir trabajando alrededor del tubo.
Cómo pelar los calamares
La clave para conseguir unos calamares tiernos y flexibles está en la forma de limpiarlos, prepararlos, marinarlos y cocinarlos. Siga estos pasos de expertos (haga clic en la galería de abajo y vea el vídeo para obtener una orientación más detallada) para saber cómo hacerlo correctamente:
Al limpiar el calamar, es mejor quitarle la membrana exterior de color rosa violáceo. Es comestible, pero es esta membrana la que tiende a volverse gomosa al cocinarla. Además, el calamar tiene un aspecto mucho más apetecible sin ella.
La propietaria Petrina Loh, de Morsels, en Dempsey Hill, recomienda también marcar los calamares en forma de cuadrícula y marinarlos en leche o suero de leche durante la noche. El líquido ayuda a ablandar el cefalópodo.
La regla general del chef Loh a la hora de cocinar calamares es: a fuego lento, mucho tiempo; y a fuego fuerte, poco tiempo. Por ejemplo, si se guisa, hay que hacerlo a fuego lento durante unas horas. Si se hace a la parrilla, hay que utilizar una sartén caliente y asar durante 30 segundos. Para saltear también hay que poner una sartén a fuego alto y cocinar los trozos de calamar durante no más de 30 a 45 segundos.