Patatas a lo Pobre, Poor Man’s Potatoes
Un artículo genial, denso, con mucha información, se ha «refrescado» en una época ideal, ya va despuntando el buen tiempo. Aunque no soy una adepta, a beberlo como si de agua se tratase, puedo tomarlo como si fuera una sopa, de vez en cuando.
#39 Dos marcas que veo de Oz con bastante frecuencia son Yellow Kangaroo y Jacobs Creek. Creo que tendrías razón, daño hepático seguro. Creo que el zumo de uva tiene el mismo efecto sin golpear el hígado 🙂
Shiraz es una uva roja y el vino es tal vez el más popular ‘rojo’ hecho y beber aquí en Oz, Lisa. Entiendo, sin embargo, que los beneficios antioxidantes de beber vino tinto (debido a las grandes cantidades requeridas para el efecto) son superados por el inevitable daño hepático, aunque podría estar equivocado. Saludos
#29 tu gracioso Ken Boddie, envejecer «con desgracia», como que quiero envejecer con gracia, entonces escuché una voz en mi cabeza que decía: «¡Qué ‘chu’ talkin bout Lisa!» PD: Creo que el Shiraz sí tiene propiedades antioxidantes… quizás retrasa el envejecimiento, eso dicen. Es un vino tinto más oscuro, ¿no?
Potaje de alubias con acelgas
La inmensa variedad de la cocina andaluza sólo es comparable a su diversidad como territorio: ocho hermosas provincias en las que se encuentran costas, marismas, montañas, llanuras y remotas zonas de montaña. Esto, sumado a sus profundas raíces identitarias, ha dado lugar a una de las tradiciones culinarias más ricas no sólo de España, sino de Europa. Algunas de sus recetas han logrado traspasar las fronteras, como el gazpacho, los flamenquines o los espetos de sardinas, pero aquí tiene otros platos menos conocidos de la región -uno de cada provincia- que le tentarán y quizá le sorprendan.
El secreto de este postre «Leche frita» radica en cocer a fuego lento la leche con canela y ralladura de limón, luego se añade harina y azúcar para espesar la mezcla. Esta masa se deja enfriar y, una vez conseguida la textura gelatinosa deseada, se reboza en huevo y harina, se fríe y se cubre con azúcar y canela en polvo. Si suena un poco raro, es absolutamente delicioso. Este dulce se suele preparar en Semana Santa.
Uno de los manjares marinos por excelencia en esta provincia, estas anémonas marinas de color verde que viven en las rocas se rebozan en huevo y harina, y luego se fríen, creando una capa crujiente (y se sirven sin tentáculos, por cierto). Debido a su delicada y gelatinosa textura, las ortiguillas parecen bailar en la boca, y su intenso sabor es como dar un mordisco al mar.
COCIDO DE GARBANZOS Y SOPA CON FIDEOS Receta
El gazpacho es originario del sur de España, concretamente de la región de Andalucía, y es una sopa perfecta para el verano, ya que es muy refrescante, se tarda muy poco en hacer y los ingredientes son todos muy comunes y se encuentran en la mayoría de los países.
Esta sopa fría de verduras crudas y mezcladas se consume mucho, sobre todo en los veranos calurosos, ya que es refrescante y fresca. En Andalucía, la mayoría de las recetas de gazpacho suelen incluir pan duro, tomate, pepino, pimiento, cebolla y ajo, aceite de oliva, vinagre de vino, agua y sal.
El gazpacho se hace tradicionalmente en un mortero y el pan es ideal cuando tiene una semana. La mezcla de pan y verduras se machaca hasta formar una pasta, y entonces se empieza a añadir los tomates, luego el aceite de oliva y finalmente el vinagre, probando todo el tiempo para asegurarse de que se ha hecho bien. Los tomates deben pasarse siempre por un colador para que no queden semillas en el plato terminado.
La tradición cuenta que, antes de partir en su primer viaje, Cristóbal Colón se cargó con barriles de esta antigua mezcla que había alimentado a tantos pueblos. Con la adición del tomate de los Andes, lo que más tarde se llamará gazpacho, adquirirá fama internacional.
Pollo al Chilindrón casero. Recetas de cocina
Los beneficios para la salud de la dieta mediterránea son bien conocidos. Además de ser más saludable, un artículo reciente concluye que el menú que se come tradicionalmente en España deja menos huella de carbono que el de Estados Unidos o el Reino Unido.
La huella de carbono diaria media obtenida fue de 5,08 kg de CO2 equivalente (CO2e), mucho menos que la media de EE.UU. (estimada entre 8,5 kg y 8,8 kg de CO2e) o del Reino Unido (estimada en 7,4 kg de CO2e); todo ello para la misma ingesta calórica. La huella de carbono también se obtuvo para otras 17 dietas terapéuticas como la blanda, la líquida o la baja/alta en proteínas. «Las diferencias entre el valor medio de la dieta mediterránea y el de los países anglosajones se debe a que en España se consume mucha menos carne de vacuno (un alimento con mayor huella de carbono) y se consumen más verduras y frutas, que tienen una menor huella de carbono», afirma el experto. «Por tanto, no sólo es más saludable, sino que nuestra dieta es más ecológica».¿Qué es la huella de carbono? La huella de carbono expresa la cantidad de dióxido de carbono equivalente que causa el calentamiento global (medido en kg de CO2 equivalente). Además del dióxido de carbono, hay otros gases contaminantes que contribuyen al cambio climático, como el metano, y cada uno de ellos tiene un potencial de calentamiento global (proporcionado por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC)) que se relaciona con el causado por una unidad de dióxido de carbono. En el caso del metano, éste tiene un potencial de calentamiento global de 25, lo que significa que se reconoce como 25 kg de dióxido de carbono equivalente.